¿Sufres trastornos alimentarios?
Los trastornos de conducta alimentaria (TCA) son más frecuentes en la población adolescente, donde la autoestima y la imagen corporal cobra más importancia que durante la etapa adulta. En general, con control médico y psicológico, son psicopatologías con un buen pronóstico, aunque hay casos que pueden generar grandes afecciones a la salud del paciente.
Hoy nos centraremos en la bulimia nerviosa. Las personas que padecen este tipo de enfermedad llevan a cabo atracones, seguidos de métodos compensatorios inapropiados para evitar la ganancia de peso. Un atracón es una ingestión exagerada de comida durante un corto plazo de tiempo. Generalmente, ingieren grandes cantidades de alimentos con un alto contenido calórico. Cuando este tipo de pacientes llevan a cabo esta conducta, prosiguen por compensarla de alguna forma, ya sea vomitando, tomando laxantes u otros métodos menos frecuentes que no son saludables ni para su cuerpo ni para su mente.
La bulimia nerviosa es un ejemplo de enfermedad que se asocia a una alteración en la alimentación. Aunque por causas distintas, cada vez son más frecuentes los trastornos asociados a la nutrición, incluyendo el sobrepeso y la obesidad. Somos lo que comemos, y necesitamos comer para vivir. Parece algo muy obvio: hasta la parte más primitiva de nuestro cerebro lo sabe. No obstante, la humanidad está evolucionando hacia una dirección que está alterando algo tan básico como la alimentación, presentando cada vez con más frecuencia trastornos de este tipo.