Alimentos ricos en probióticos

Los probióticos son microorganismos vivos que, cuando se administran en cantidades adecuadas, confieren un efecto beneficioso para la salud del sujeto que los recibe. Se encuentran sobre todo en alimentos fermentados, y hay numerosas maneras de incluirlos en la dieta de forma sencilla, estos son algunos de ellos:

Yogur

Es una buena fuente de probióticos, siempre que se consuma entero y sin azúcar. Puede ser yogur griego o natural, tanto de vaca como de cabra o de oveja, incluso yogur de soja.

Kéfir

Es un derivado lácteo similar al yogur líquido fermentado a través de la acción de un conjunto de levaduras y bacterias y contiene una alta cantidad de probióticos, además, se puede preparar en casa.

Choucroute

Se trata de col fermentada y es muy habitual en países de la Europa central como Alemania, Polonia y Rusia, tiene un sabor ácido e intenso y puede prepararse de numerosas maneras, aunque la más habitual es como guarnición de platos de carne. Su contenido en probióticos es muy elevado.

Kimchi

Se trata de col china fermentada y es muy habitual en la cocina de Corea, también es una buena fuente de probióticos, que puede ser interesante incorporar a la dieta en momentos puntuales. Se elabora con coles saladas marinadas en pimiento rojo picante, cebolla, ajo, jengibre y pescado. Se puede tomar como aperitivo, en guarnición o como plato principal, acompañado de arroz y otras verduras.

Miso

Es un ingrediente clave de la cocina japonesa y destaca por su alto contenido en probióticos y umami, un potenciador natural de los sabores al que se conoce como “el quinto sabor”. Es un condimento en forma de pasta que se elabora a partir de los granos fermentados de la soja, con cebada o arroz y sal.

Kombucha

Es una bebida de sabor ácido e intenso con numerosas propiedades beneficiosas para la salud y se pueden encontrar diversas variedades. Se obtiene a partir de la fermentación de diversos microorganismos, que necesitan azúcar para crecer.